"El hombre corriente, cuando emprende una cosa, la echa a perder por tener prisa en terminarla" (Lao Tse).
En el deporte de competición es muy habitual el querer obtener resultados cuanto antes sin tener en cuenta el proceso para conseguirlo. Actualmente, los ejercicios de fuerza isométrica o el llamado CORE, se han introducido en la piscina con una gran fuerza. Muchos entrenadores los ponemos en práctica con nuestros nadadores explicándoles la importancia del centro de nuestro cuerpo para la estabilidad del mismo y para el control postural dentro y fuera del agua. También estos ejercicios ayudan a prevenir lesiones y a nadar más eficientemente.
Cuando queremos poner en práctica estos ejercicios y siempre con la mente puesta en exigir a nuestros nos olvidamos de los riesgos que conlleva una mala ejecución de los mismos. Como mi abuela decía "despacito y con buena letra" le he hecho caso y hemos preparado una clase de pilates con los nadadores, no con la intención de provocar en ellos un gran desgaste ni mejorar la fuerza, sólo con la única intención de aprender. Así, ellos mismos serán conscientes de como deben ejecutar los ejercicios de fuerza y sabrán llevarlos a cabo sin riesgo de lesiones.
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